¿Cuál es la madre que no estaría tranquila al ver que su hijo es capaz de sentirse bien en una consulta con su dentista?
Hoy es posible asociar el tratamiento dental a una actividad placentera. Es importante crear para los pequeños un ambiente totalmente dedicado a ellos, con juegos, tele y juguetes.
¿Miedo? Ese es el sentimiento que el odontopediatra debe minimizar en la vida de sus pacientes. Para ello debe desarrollar una manera especial de tratar a los niños.
Con el objetivo de contribuir a una generación Caries – Cero, la prevención es el primer paso para la construcción de una perfecta salud bucal.
Muchas veces, las madres son aconsejadas para llevar a sus hijos al dentista solamente a partir de los 4 años de edad. Eso es un error, ya que el cuidado con los dientes deberá empezar en el mismo momento que ellos nazcan, o sea, la primera consulta deberá ser a los 6 meses de edad. Lo que muchos padres no saben es que muchos niños, en la edad de dos a cinco años, ya nos llegan con grandes caries en los dientes de leche, que pueden comprometer la pulpa (nervio), provocando con ello la necesidad de endodoncia. Esa infección en el diente de leche puede perjudicar la formación de los futuros dientes permanentes.
Para que tengamos una idea de la importancia en prevención de salud de los primeros dientes es importante decir que la pérdida precoz de los mismos, sea debido a caries o posibles traumas ocasionados por caídas, que pueden comprometer la situación de la arcada dentaria del niño, obligando al uso de aparatos en el futuro (ortodoncia).